¿Empiezan a desvanecerse?

Cada año, los días siguientes al del Alarde tenemos que soportar leer en los periódicos  titulares sobre la "total nomalidad" con la que se ha vivido la fiesta, y cada vez que lo leía me indignaba. Este año no han cambiado mucho las cosas, pero personalmente sí veo un avance.
Ahora parece que mienten, convocan una manifestación, pero en lugar de eso se ve un intento de que se parezca más al desfile, sin pancarta, sin seguidores, sólo una bandera morada y (según el diario vasco) 350 componentes en la compañía. No es una cifra sorprendente porque ya sabemos que los años en los que el día 8 cae en domingo son muchos más los desinformados ajenos a la fiesta que son engañados llamados a desfilar por la defensa de los derechos de la mujer cuando en realidad están participando en un acto totalmente ilegal que es una manifestación armada. En fin, con tal de no torcer el brazo ya no saben ni lo que hacen. Pero, ¿alguien se pregunta qué sucedió con los que normalmente siguen la manifestción? Según el diario vasco... (esto sí que es triste), este años les pidieron que se quedasen en las aceras, apoyando al desfile...
Vamos a ver, si en las aceras no se notó más apoyo hacia ellos del que es habitual cualquier año, entre los integrantes tampoco y encima no tenían a los que los siguen, y aún así se tuvieron que repartir para aparentar más... ¿Soy la única que piensa que cada vez tienen menos apoyo?

Este año cualquiera que haya pasado por la calle San Pedro ha podido comprobar como crece el movimiento "Betiko", como los apoyos del tradicional cada vez son más y más fuertes. En la Calle Mayor puede verse quién sujeta las pancartas: chicas jóvenes (dudo que todas ellas apoyasen algo que se considerase machista). Los medios de comunicación cada vez son más fieles a la verdad, la justicia nos ha dado la razón en todos los niveles a los que habéis querido recurrir... Ya no sé que más queréis. De todas formas creo que lo hicisteis mal desde el principio, hace más de 15 años, y gracias a vuestras malas actuaciones la gente al otro lado se ha ido haciendo cada vez más fuerte.

Es cierto, yo también pienso que este año se ha vivido menos tensión, a mí sí me han llamado "puta" por mantener una mirada, pero no he visto heridas, arañazos, culatazos de escopeta, golpes de baquetas o encañonar a adolescentes por estar sujetando el plástico negro. Y ¿Sabéis por qué creo que ha pasado eso? porque habéis podido mentir como nadie, engañar a la gente, manipular con el recurrido tema del sexismo, hasta que nos habéis cansado y las redes se han llenado de testimonios,  fotos y vídeos que muestran realmente cómo actuáis: agrediendo a muejeres (irónico para unas feministas) y ahora habéis optado por poneros encima la piel de cordero para que no podamos seguir consiguiendo esas imágenes.
Pues yo os doy las gracias. Gracias por darnos la razón regalándonos esas escenas repulsivas, gracias por darnos la oportunidad de demostrar que no somos sexistas, sino personas con una moral muchísimo más íntegra que la vuestra, personas nobles que abogamos por la verdad, y que nos mantenemos fuertes por defenderla.
Habéis sido vosotros con vuestra actitud las que os habéis cerrado las puertas a tener vuestra propia compañía en el Alarde, porque ahora nadie quiere que gente como vosotros ensucie nuestras fiestas, porque nosotras lo hemos defendido todo de una forma íntegra, de la que lo único que habéis podido conseguir es arrancarnos gritos de protesta y dedos levantados demostrando lo que sentimos por vuestra actitud.
Gracias, porque este año sí he visto algo: mujeres y chicas jóvenes, abuelas, madres e hijas, tres generaciones unidas de mujeres fuertes y luchadoras que no nos hemos dejado engañar y que hemos gritado con la voz de "no hemos venido a veros a vosotros y no necesitamos que nadie nos represente" .
Durante años hemos hecho sentadas delante de vosotros, nos hemos encarado a ertzainas que no nos han podido levantar, hemos dormido en la calle, nos hemos cubierto con muros negros, hemos gritado y cantado, hemos hecho ruido, hemos aguantado provocaciones y agresiones sin caer en ellas, nos hemos mantenido fuertes y seguiremos haciéndolo con tal de defender lo nuestro. Porque no necesitamos ponernos las banderitas del sexismo para hacernos oír, ni creemos en ninguno de los dos tipos. No somos machistas, pero tampoco feministas... SOMOS NOSOTRAS! Mujeres fuertes, luchadoras y unidas con una idea clara: NO NOS REPRESNTÁIS y QUEREMOS NUESTRA FIESTA EN PAZ.